¿Cruz o Calavera?
A diario, con el martirio de cada día.
El pueblo está en las calles.
Y en la calle nos espera
Cruz o Calavera;
es el sistema
del estado de sitio.
Lo ilegítimo.
El golpe.
Martillo y clavos.
De ojos, oídos y bocas
costurados.
Y en sus mansiones
esperando a ser electos:
Cruz y Calavera.
Ese es el trote
hacia allí va el diario,
para eso fue el golpe,
para que haya democracia
en la abundancia del que oprime.
Barbarie
se volvió la inteligencia.
Fuimos medidos y pesados
y no estábamos faltos,
sino en el punto
de cruz
o calavera,
que es lo mismo
en el pequeño crédito
de elegir a los mismos de siempre
para que nos orinen
el cráneo,
como una burla distinta
a las leyes que nos dicen
que para bien común
cariñosas golpizas tienen diseñadas.
Hambre,
nada de leyes,
incertidumbre,
invisibles abismos,
tajos en los ojos,
luna teñida de sangre
paz de acertijos y tumbas,
explosión,
traición
y enormes agujeros en el alma.
Dictadura,
generales en la lógica
de la riqueza por asalto,
crimen en el recato
de la dignidad
acompañada de tinieblas de fusiles,
terror en el juego de la nada
de la prensa
de la cuenta y la chequera,
agazapando la ética
en la trama de una tradición reconocida.
Miseria,
de agotarnos en la sed de los espejismos
y el crimen adobado
en la política de castrar,
agudos partos de restricciones
y mentes anudadas
al desconcierto
de que sólo es cierto
lo que a golpe
y sangre, entran.
Iniquidad,
en la ruta de las grietas,
de los gritos
y los cuchillos limpiados con billetes,
poco más,
la sonrisa de la magia
de la bruja falsificación de la identidad,
sacando conejos de la chistera
para convertirlos en lobos
en los cuarteles.
Fractura,
en la factura del tiempo
y el atraso del pie
para dar paso
o simplemente
para mantenerse de pie.
Sea la historia de cazabobos
donde flameen banderines,
nos tatúen carteles
y saquen urnas,
los que no valoran
la opinión del pueblo
y nos dan por siempre,
Cruz o Calavera.
Candelario Reyes García
Poeta
Honduras
Día 13 del golpe.
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